Cubanow

Cubanow es una revista digital sobre el universo audiovisual nacional e internacional.

tv

Roly González: Siempre estoy listo para un nuevo proyecto

Por: Maya Quiroga

Fotos: Cortesía del entrevistado

Para algunos adolescentes y jóvenes cubanos Roly González es una especie de Dios, cuyos múltiples rostros los han acompañado en los últimos meses, una vez a la semana, a través de la señal de Cubavisión.

En búsqueda de su historia de vida nos acercamos, desde Cubanow, a las aspiraciones y el desempeño profesional de este joven actor de 27 años, natural de la Isla de la Juventud y conductor del programa de televisión Otaku Sempai.

“Soy un soñador, pero no quiero ser el único. Me gusta tener sueños y trazarme metas y la actuación fue uno de esos sueños”.

“Creo que de pequeños la mayoría solemos ser los artistas de la familia, luego, con el crecimiento, eso va como pasando a segundos o terceros planos y en un momento desaparece. No fue mi caso.

“Me pienso bastante tímido, hasta algo introvertido. Dice mi familia que no, que animaba los cumpleaños y siempre en los matutinos luchaba mi bocadillo, ¿quién no hizo reparto en las representaciones de la primaria? El Pacto del Zanjón, Abdala u otro de los clásicos matutinos”.

Cuenta Roly que en su primera infancia nunca escuchó hablar de la Escuela Nacional de Arte (ENA) ni de la Universidad de las Artes (ISA):

No sabía lo que era la ENA, me enteré cuando llegó a mi escuela la convocatoria y le pedí a mi mamá que me llevara. Le dijeron «tu niño tiene talento, pero es muy inmaduro y esta escuela requiere madurez porque es para adolescentes becados» y no me aceptaron. Al final me bequé, pero en un Instituto Politécnico de Informática que era la carrera del momento”.

Una vez graduado y ya trabajando en la especialidad de Informática tuvo noticias de que en la televisión estaban buscando actores para realizar una obra de teatro. En ese momento cursaba un taller de verano de actuación y el profesor me dijo que me presentara. Él estaba seguro de que me iban a aceptar. Luego de varios días de casting fui seleccionado y así comenzó otra etapa de mi vida, la más complicada hasta el momento.

“Alternaba el teatro con mi trabajo. Al principio fue posible, después tuve que elegir. Cuando lo dije en casa se activaron las alarmas. Mis abuelos exclamaron «tú estás loco» porque abandonaba un salario de 450 pesos por uno de 250, sin garantía y eso es un tema delicado, pero de ahí las metas. Con el teatro, llegó la radio y más tarde la televisión, ya la locura estaba consiguiendo grados satisfactorios.

“Comencé en el 2013 en la compañía Pinos Nuevos que radica en la ciudad de Nueva Gerona. Esa fue mi primera escuela donde participé en varias obras de teatro: el Pepe de Contigo pan y cebolla fue mi primer papel. Presentarme con tan corta experiencia en el XIV festival de Teatro de Camagüey fue una gran responsabilidad.

“Estando en la Isla laboré en Radio Caribe y en el telecentro Islavisión, un canal que es para mí una gran familia, en programas como Reflejos, Tesoros de mi isla, el Mejunje, en algunos cortos de ficción y un teleteatro titulado Caricias que fue un gran reto para mí. Esos son los proyectos que recuerdo con agrado”.

Para Roly su progenitora ha sido faro y guía de su existencia, así como fuente de motivación y de confianza para ingresar al ISA: He tenido la suerte de cruzarme con personas especiales, le agradezco a la vida por eso. Increíblemente también fui con mi mamá, en esta ocasión no me llevaba, me acompañaba. Tampoco fui seleccionado. No me dijeron que era inmaduro (jajaja), ni que tenía talento, solo que hay que ir preparados y así fue como en segunda vuelta, en el 2016, logré entrar. Otro sueño hecho realidad.

“El ISA me define como persona, como artista, y me regala un piquete de amigos para siempre. Me siento dichoso de los maestros y profesores que he tenido y el ISA no fue la excepción, gracias a ellos mi libertad de pensamiento y mi desarrollo como actor.

“Mis estudios en la Universidad me obligaron a permanecer mucho más tiempo en la capital, siempre buscaba un acercamiento al teatro, de ahí mis colaboraciones con grupos como Teatro Pálpito con el cual conocí muchas ciudades cubanas y Teatro El Público, en el cual me evalué, ya que ambos directores están muy cercanos en la formación de actores.

Aquí en La Habana trabajé muy poco para la televisión, unas apariciones en el programa Contar la historia del Canal Educativo y en el dramatizado Cuando una Mujer. Realmente soy un desconocido para los directores de los medios nacionales. He colaborado mucho en el ISA en algunos cortos de ficción con estudiantes de la Facultad de Arte de los Medios de Comunicación Audiovisual y de la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de los Baños”.

En estos momentos de pandemia Roly cursa el quinto año de actuación y según sus palabras trabaja intensamente para cerrar con éxito una maravillosa etapa de su vida.

“Graduarme en medio de esta situación tan compleja que estamos viviendo es una de mis metas más cercanas. Me encuentro trabajando en dos proyectos de tesis: uno con el Grupo de Teatro Estro de Montecallado, el cual dirige mi tutor, y el grupo Camarcó Teatro que me abrió sus puertas para estrenarme en la dirección escénica”.

Durante los últimos meses hemos visto a Roly encarnar varios personajes en el programa juvenil Otaku Sempai, que dirige el laureado realizador pinero Francisco Leyva Ferrer (Picky).

“El 2020 fue un año muy difícil para muchos. Pienso que, para la mayoría, pero llegó una etapa donde pensamos que le habíamos cogido la vuelta. Por eso comienzo a trabajar en casa en nuevos proyectos. Ir a ver una obra siempre es una buena opción. Entonces fui al teatro y se me sentó al lado Picky, antes de que la obra empezara comenzamos a conversar.

Me contó que tenía varios proyectos y me iba a llamar para uno de ellos. Me alegré mucho pues ya habíamos trabajado juntos en un hermoso programa de aventuras y sabía que algo bueno tendría en mente. Me gusta confiar en las personas, porque son muchos los que han confiado en mí. Y un buen día me llamó, me pasó los guiones y nos citamos. Me mostró junto con la productora los videos de la temporada anterior y me explicó que había una comunidad de jóvenes Otakus en espera del regreso del programa.

“No hay nada mejor para un actor que encontrarse a un director que te hable, te escuche y te deje crear. Me entregué, como intento hacer siempre que tengo un buen proyecto en mis manos. La televisión es muy inmediata: hoy dices que sí, mañana estás grabando y en dos semanas hay que terminar todo un paquete de programas”.

En cada uno de los 21 capítulos de la serie el actor nos regaló un repertorio de graciosos caracteres que hacen las delicias de sus seguidores.
En cada uno de los 21 capítulos de la serie el actor nos regaló un repertorio de graciosos caracteres que hacen las delicias de sus seguidores.

“Le dije a Picky que más que conducir, algo que me ha tocado hacer y me gusta, lo que más deseaba era actuar. De ahí viene la idea de construir personajes, desde la caricatura, la frescura y la libertad que te dan los temas que tiene esta temporada de Otaku Sempai.

“Tuve este coqueteo con el humor desde los personajes, algo que respeto mucho, pero me atreví porque en la beca del ISA lo hago todo el tiempo: me monto personajes y mis colegas me siguen la cuerda. Y ahí se nos van las horas, creo que deberían tenerlo en cuenta como horas clases (jajajaja). Rara vez estoy totalmente satisfecho con mi trabajo, en el plano personal, pero de este algo positivo logramos.

Confiesa Roly que antes de formar parte del colectivo y ser el rostro del programa no tenía noción de lo grande que resulta la comunidad Otaku cubana, aunque en su niñez y adolescencia había consumido mangas y series animes por televisión.

“Sabía que existían los Otakus y que se reunían en el cine Riviera una vez al mes. Hasta llegué a ver en el ISA como realizaban par de eventos vinculados a la cultura japonesa y muestras de cosplay, dibujos y materiales de Otakus de otras universidades. Tenía una amiga que siempre me hablaba de las series que estaba viendo pero hasta ahí las clases. Soy fiel a todo lo que me acompañó a crecer: los libros, juegos, series y películas de mi infancia siguen siendo mis preferidas. Esta etapa de encierro me lo ha demostrado.

Para los adolescentes y jóvenes (de 11 a 33 años) que integran el grupo de WhatsApp OtakuSempai2020, creado en el mes de septiembre del pasado año, Roly constituye el Kamisama (Todopoderoso) Otaku.

“Este programa es de sus seguidores, independientemente que se han sumado muchas personas de diferentes edades a verlo. Pero tiene como concepto un grupo etario (adolescentes de 12 a 15 años) y el público sentado frente a la tele, que entiende lo que dices, sabe bien de lo que estamos hablando y puede llegar al punto de no quedar convencido de lo que está viendo o tener un criterio distinto.

“Por lo tanto, la interacción en las redes sociales es real, el peso mayor de esta historia lo lleva el director junto con los administradores. Ellos manejan el grupo de WhatsApp del programa; Picky, controla los correos electrónicos, los ordena y me comparte lo necesario.

“Hemos tenido encuentros dedicados enteramente a estos temas, porque después de cada emisión cae una lluvia de mensajes por todas las vías. Mantengo comunicación directa con todos los que me escriben a mi página de Facebook o Instagram, y lo seguiré haciendo porque su satisfacción también es una meta para mí”.

A la interrogante de ¿qué le ha aportado este programa?, Roly responde: De cada proyecto uno se lleva algo, casi siempre lo positivo. Al empezar jamás pensé que me divertiría tanto y a la vez aprendería. Somos un pequeño, pero entusiasta colectivo. Cada uno tiene lo suyo, pero el engranaje es bueno y eso se agradece. Algo importante es que gracias al programa cada día me actualizo más en cuanto al género. Le sumé a mi tiempo de televisión una nueva serie ánime.

Casi a punto de concluir nuestro diálogo virtual le pregunto si considera que Otaku Sempai le ha dado popularidad.

“Había tenido ese privilegio de ser detenido en la calle para una que otra felicitación, quizás hasta una foto después de terminada una función. Pero esta avalancha de seguidores –y no hablo de las redes sociales, que ese es otro tema–, no me la esperaba. Ha sido lo más lindo que he recibido. Si este es el resultado del trabajo, pues me tendrán trabajando duro por mucho tiempo, porque no hay mayor premio que un aplauso, una felicitación, un saludo cariñoso. Que te pidan un autógrafo en el 2021 para mí es un regalo muy grande, la verdad”.

A modo de despedida el actor concluye: “Luego de culminar esta temporada de Otaku Sempai nos queda pensarnos otra que pueda ser superior. Los nuevos medios avanzan rápido y la televisión debe tener eso en cuenta. Manteniendo la fe, estoy seguro de que después de la pandemia llegarán hermosos papeles a mis manos: siempre estoy listo para un nuevo proyecto”.

Estamos en redes sociales:

En Facebook

En Twitter

En Telegram

 

  • Tenemos una newsletter en la que te actualizamos de lo noticioso de la semana. Si deseas suscribirte envíanos un correo a revistadigitalcubanow@gmail.com con el Asunto: Quiero suscribirme
¿Te Gusta?
 
 
   

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *